Luis Riera, director de SAIA, Consultoría de Seguridad Alimentaria, comenta que si el apagón fue breve (por ejemplo, 1 o 2 horas), «casi todo estará a salvo» mientras que si fue largo, en torno a 8 horas o más, «habrá que ser muy estricto con qué se puede salvar». La clave reside, principalmente, en mantener la puerta de la nevera y el congelador sin abrir para así mantener más tiempo el frío. «En el momento que se va la luz, no abras la puerta de la nevera ni del congelador….
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